Lena nombre vikingo “radiante, luminosa, fuego” la verdad unos 6 años atrás estaba lejos de sentirme así, si! como todo ha sido un arduo, continuo y hermoso proceso, durante años fui una niña asustadiza, enamoradiza, ansiosa, miedosa, con tendencias suicidas, bulímica, precoz, impulsiva, rencorosa, vengativa, rabiosa, contestona, capaz de herir de manera diplomática y suspicaz ( jajaj en serio sigo amando esa pequeña parte oscura), indecisa, incapaz… el listado realmente es largo, durante 26 años puedes llegar a sentir y crear una lista innumerable de emociones que sin freno terminan desbordadas, cuando no te enseñan la importancia de la gestión emocional terminas estropeado no de manera definitiva pero si una gran parte de tu vida, es como si se fuera por el retrete.
“Lena nombre vikingo “radiante, luminosa, fuego” .
Llevo años de una lucha con mi cuerpo y con mis emociones, con mis constantes fracasos amorosos, con una culpa y frustración exagerada que crearon una imagen totalmente distorsionada de quien soy en realidad, día a día explotaba mi cuerpo, mis emociones y claro mis acciones, hasta tocar fondo. Un día mi cuerpo dijo “no más Lena, te estás matando realmente es lo que quieres? Y con toda honestidad y con el alma dolorida respondí no!! Pero no se qué hacer? Por dónde empezar? Las preguntas exactas en el momento justo. Soy honesta que no sé como tantas herramientas han llegado a mis manos de hecho siempre he sido una curiosa innata, lo primero fue dejar de vomitar, no solo la comida, dejar de vomitar mis sueños, mis logros, mi amor propio, mis capacidades, mis actitudes. Ya era hora de parar con esta bulimia intermitente de 15 años que me tenían frente al espejo sintiéndome con 50 años más de los que realmente tenía en ese momento y con una necesidad enorme de CAMBIAR, mi cuerpo se estaba dando por vencido pero mi ser siempre ha estado unido a Dios (divinidad, universo, tú solo nómbralo como mejor te parezca) y sé que Él siempre estuvo atento a mí! A mis dolores a mis soledades, a mis angustias incluso a mis continuos reclamos sin sentido y como toda niña necia que no oye ni ve por años fui en contra corriente sin entender que la solución estaba más cerca de lo que imaginaba. Así poco a poco han llegado a mi incontables herramientas, han llegado a mi innumerables revelaciones, me he reinventado o mejor me he descubierto, cada libro, cada lectura, cada persona, cada meditación, cada enojo, cada llanto, todo absolutamente todo me enseña, me nutre y eso le suma un valor agregado a cada día de mi vida.
Todo este recorrido me ha convertido en una mujer “GUERRERA” empoderada y consciente de mis emociones, de mis aciertos y desaciertos pero sobre todo con una convicción magnifica de quién soy y para donde voy.
Soy una mamá con maestría, empresaria en formación, coach empírica con un propósito claro de vida, crear círculos de amor desde la empatía y afianzar fuertes lazos femeninos que tanto valor y poder otorgan a lo que somos “MUJERES” “VALIENTES Y GUERRERAS”.
Lena
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